Platón y sus citas célebres
Una de las figuras más prominentes de la historia, fue el filósofo Platón, mismo que hoy en día sigue siendo recordado no solo por historiadores, sino por prácticamente personas de todos los ámbitos. De él conservamos muchos textos y enseñanzas que nos han ayudado a comprender mejor el mundo que nos rodea. Habiendo sido contemporéneo de otros filósofos importantes como Aristóteles o Sócrates, hasta la fecha se le continua recordando con gran admiración. En esta ocasión en Descubre Nombres, hemos preparado un artículo muy especial con una breve biografía suya además de sus citas más célebres, que no te vas a querer perder.
Biografía de Platón
Primeros años
Platón nació en Atenas en el año 427, en el seno de una familia de clase alta. Como todos los atenienses, recibió la instrucción adecuada a la época hasta que en su juventud, quiso abandonar sus aspiraciones políticas y literarias por la filosofía, al recibir una fuerte influencia de Sócrates, su más destacado maestro.
Por veinte años fue un fiel discípulo para este último y se caracterizó por su oposición a los sofistas de la época, tales como Gorgias y Protágoras. No obstante, tiempo después Sócrates era condenado a muerte y fue por esa razón que Platón partió de Atenas y mantuvo un perfil muy bajo, lejos de las habladurías de la vida pública. Durante este período, la política continúo ocupando un lugar importante en su manera de pensar y fue así que llegó a concebir el concepto de un Estado Perfecto, que tanto mencionara en sus obras posteriores.
Los viajes de Platón
Tras abandonar Atenas, Platón se dedicó a viajar por todo Oriente y el sur de Italia, en donde tuvo contacto con los discípulos de Pitágoras. Más tarde se dirigió hacia Siracusa, donde fungió como asesor del rey Dionisio I el Viejo, experiencia que no terminó del todo bien.
Debido a un fuerte desacuerdo que tuvo en dicho lugar, acabó como prisionero de unos piratas hasta que se pudo pagar el rescate que pedían por él. A partir de entonces regresó a Atenas, donde fundó su propia escuela de filosofía para el año 387 que estableció en los límites de la ciudad. Dicho lugar fue llamado Academia, en honor al héroe griego Academo.
La Academia de Platón se convirtió en un lugar muy importante y recinto de reunión para varias figuras que serían célebres después, como Aristóteles. En este lugar se daban cita varios sabios y estaba conformado por una biblioteca, una residencia para estudiantes, seminarios y salones especiales para impartir clase. Se conoce a este sitio por sentar al presidente para las universidades modernas. Tambiéns se destacó no solo por un punto de estudios para filosofía, sino para varias ramas que de esta se desprendieron, como la ética y la física.
Las obras de Platón
A diferencia de su maestro Sócrates, Platón documentó todos sus pensamientos en obras que a día de hoy, se consideran de gran importancia. Lo peculiar de estos trabajos, fue el hecho de que él escribió la mayoría de los mismos a manera de diálogos, algo completamente nuevo para su tiempo.
Existen en total veintiséis diálogos platónicos que se han comprobado como auténticos, (aunque en realidad, supuestamente de él se conservan más de cuarenta), que se pueden clasificar en tres grupos distintos.
- Los diálogos del período socrático. Como su nombre lo indica, reflejan toda la influencia que el filósofo obtuvo de los métodos de Sócrates.
- Los diálogos del período constructivo o sistemático. Que comprenden una etapa de transición entre personajes como Protágoras y Menón.
- Los dialogos del período o revisionista. Estos últimos, fueron los que escribió a partir de la fudación de la Academia.
La filosofía de Platón es una de las más tenidas en cuenta hasta la fecha por diversas casas de estudios.
Curiosidades de Platón
- Se le puede considerar como el padre del idealismo, ya que fue el primero en afirmar que había un mundo sensible más allá de las cosas que podíamos ver. Fue también quien dijo que una de las cosas más importantes, era buscar el sentido de la vida.
- En su juventud fue discípulo de Dionisio, un maestro muy conocido de la época. De él habló en las memorias que reatraó en Anterastes, una de sus obras más conocidas.
- La filosofía no fue la única actividad en la que se destacó. Platón también fue bueno con la pintura, además de componer cantos y tragedias. Algunos de sus contemporáneos dijeron que también participó en los Juegos Ístmicos.
- Fue maestro de Aristóteles. Este último se convirtió en un discípulo muy querido para él y lo admiraba por su inteligencia. Cuando Aristóteles creció, se convirtió en uno de los filósofos con más renombre de la época.
- En una ocasión navegó hasta Sicilia en donde se enfrentó con el tirano Dionisio, a quien le habóa sobre la tiranía. Este último se molestó tanto, que le respondió que todas sus razones sabían a chochez.
- Platón no era su verdadero nombre, sino un seudónimo que le sirvió para darse a conocer. Él en realidad se llamaba Aristocles. Eligió el nombre de Platón porque este quiere decir, «ancho de espaldas», y él le daba mucha importancia precisamente a mantenerse en forma.
- Tuvo dos hermanos que se llamaron Adimanto y Glaucón, además de una hermana, que se llamaba Potone y fue madre de Espeusipo.
Citas célebres de Platón
- El cuerpo humano es el carruaje; el yo, el hombre que lo conduce; el pensamiento son las riendas, y los sentimientos los caballos.
- No hay hombre tan cobarde a quien el amor no haga valiente y transforme en héroe.
- Cuando la muerte se precipita sobre el hombre, la parte mortal se extingue; pero el principio inmortal se retira y se aleja sano y salvo.
- No dejes crecer la hierba en el camino de la amistad.
- Son filósofos verdaderos aquellos a quienes gusta contemplar la verdad.
- Dos excesos deben evitarse en la educación de la juventud; demasiada severidad, y demasiada dulzura.
- El objetivo de la educación es la virtud y el deseo de convertirse en un buen ciudadano.
- La mayor declaración de amor es la que no se hace; el hombre que siente mucho, habla poco.
- Son filósofos verdaderos aquellos a quienes gusta contemplar la verdad.
- Cuando una multitud ejerce la autoridad, es más cruel aún que los tiranos.
- Buscando el bien de nuestros semejantes, encontramos el nuestro.
- Los amigos se convierten con frecuencia en ladrones de nuestro tiempo.
- Debemos buscar para nuestros males otra causa que no sea Dios.
- Todo lo que nace proviene necesariamente de una causa; pues sin causa nada puede tener origen.
- Allí donde el mando es codiciado y disputado no puede haber buen gobierno ni reinará la concordia.
- La música es para el alma lo que la gimnasia para el cuerpo.
- El legislador no debe proponerse la felicidad de cierto orden de cuidadanos con exclusión de los demás, sino la felicidad de todos.
- Hay que tener el valor de decir la verdad, sobre todo cuando se habla de la verdad.
- La burla y el ridículo son, entre todas las injurias, las que menos se perdonan.
- ¿Quién es, pues, el creador y padre de este Universo? Difícil es encontrarlo; y cuando se ha encontrado, imposible hacer que la multitud lo conozca.