Walt Disney y sus citas célebres
En esta ocasión, el artículo de frases célebres que traemos para ti está dedicado a una de las mentes más brillantes del siglo pasado y que aun después de haber partido sigue teniendo una gran influencia en la cultura popular. Hablamos por supuesto de Walt Disney, gran empresario que comenzó como dibujante y que poco a poco fue escalando sus sueños hasta conseguir fundar una de las compañías más grandes del mundo. De él tenemos grandes frases que te inspirarán a ser mejor cada día y alcanzar las metas que te propongas. ¿Nos acompañas a descubrirlas?
Historia de Walt Disney
Primeros años
Walt Elias Disney nació el 5 de diciembre de 1901 en Chicago, Illinois. Provenía de una familia que se dedicaba a la vida en el campo, pues sus padres se mudaron a una granja durante su infancia. Por parte de su padre contaba con ascendencia irlandesa y por parte de su madre, con antepasados alemanes. Aunque existen ciertos rumores que decían que también pudo tener cierto origen español, algo que hasta la fecha jamás ha podido confirmarse del todo.
Desde muy pequeño, Walt mostró afición y gran talento para el dibujo. Su época infantil la pasó ayudando a su familia con las labores en la granja y también dibujando pequeños bocetos que mostraban la vida en ese lugar.
No obstante, en 1910 la familia tendría que abandonar ese sitio a causa de una fiebre tifoidea que dejó al padre imposibilitado para trabajar. Volvieron a mudarse, esta vez a Kansas City, donde él empezó a trabajar como repartidor de periódicos ayudado por Walt y su hermano Roy. Este empleo era bastante demandante, lo que provocó que el futuro empresario no pudiera concentrarse del todo en sus estudios y se quedará dormido en clases. También se distraía constantemente haciendo todo tipo de garabatos.
Walt tenía también un gran interés por los trenes. Cuando tenía quince años, consiguió un trabajo como vendedor ambulante en el ferrocarril de Santa Fe.
En sus años de escuela participó en el periódico escolar, dibujando cómics que se centraban en la Primera Guerra Mundial y tenían un estilo patriótico. Inspirado por el ejemplo de su hermano Roy, quiso enrolarse en el ejército para combatir en la guerra, siendo rechazado por no haber cumplido la mayoría de edad. No obstante después falsificó sus documentos y consiguió entrar como colaborador de la Cruz Roja, siendo enviado a Europa.
A pesar de ello él nunca llegó a entrar en combate, ya que Alemania no tardó en firmar el armisticio. Walt se quedó en Francia, donde trabajó por un tiempo como conductor de ambulancias, recogiendo a oficiales que volvían malheridos de la guerra. En 1919 pidió su relevo a las autoridades y pudo regresar a los Estados Unidos.
Inicios en la animación
Al volver a Kansas City, su hermano Roy le consiguió empleo en el Pesemen-Ruby Art Studio, donde él dibujaba todo tipo de anuncios para el cine y los periódicos. En ese entonces tenía claro su deseo de dedicarse a la animación y tener una carrera exitosa; a pesar de que parecía ser algo poco probable.
En ese lugar conoció al animador Ubbe Iwwerks, con quien se asoció para iniciar su propio negocio de animación. Debido a la falta de clientela el proyecto no tuvo éxito, pero ambos fueron contratados por la empresa Film Ad, en la cual tuvieron oportunidad de aprender más acerca de los dibujos animados y en la cual, un par de años después, Disney decidió que contaba con la experiencia suficiente como para trabajar por su cuenta.
La primera empresa que fundó se llamó Laugh-O-Gram Films, la cual empezó a desarrollar cortometrajes basados en cuentos populares infantiles, como por ejemplo «El gato con botas».
Sus esfuerzos lo llevaron a la bancarrota, debido a que sus cortos siempre superaban su presupuesto. Más él no se dio por vencido y se trasladó a Hollywood, la meca del cine, en donde vivió en casa de su tío Robert y acondicionó el garage de la misma para seguir intentando con la animación, esta vez combinándola con actuaciones de personas reales.
Primeros éxitos animados
El primer personaje animado de Walt Disney que llegó a ser exitoso, fue «Oswald, el conejo afortunado». Sin embargo este fue dibujado por su antiguo socio Iwwerks, con quien había vuelto a reunirse. Por problemas que tuvieron que ver con arreglos económicos desventajosos para él, Disney perdió los derechos sobre el personaje y tuvo que crear uno nuevo.
Fue así como surgió el famoso ratón «Mickey Mouse», que más adelante se convertiría en el rostro de todo un imperio comercial. El mismo Disney le prestó su voz al animarlo y el personaje alcanzó un rotundo éxito, apareciendo en historietas cómicas y cortometrajes. Con el tiempo fueron creados sus amigos como el pato Donald, el perro Pluto y su novia Minnie. Alentado por su reciente logro. el dibujante creó también la serie de películas musicales «Silly Symphonies». Estaba por comenzar su mejor época.
Consolidación de Disney
En 1938, la compañía de Walt Disney estrenó el largometraje animado «Blancanieves y los siete enanitos», un ambicioso proyecto que se preparaba desde tres años atrás y que fue se convirtió en la película más taquillera de dicho año, recaudando 8 millones de dólares.
Con el dinero, Disney construyó unos estudios nuevos en la ciudad de Burbank en donde produciría «Fantasía» y «Pinocho», hoy grandes clásicos del cine de animación. También continúo haciendo cortometrajes. No obstante, su recién creada empresa tendría que enfrentarse a la huelga de animadores de 1941 y los años de la Segunda Guerra Mundial, que afectaron a la industria cinematográfica en Estados Unidos.
Dichos cambios no fueron, sin embargo, un obstáculo para que la compañía viviera su época dorada consolidándose como la más importante en el ámbito de la animación. De la mano de Disney surgieron grandes filmes que le concedieron galardones como los Oscares y los Emmys, gracias a filmes como «La Cenicienta» y «Alicia en el País de las Maravillas». Su imperio creció tanto que pronto pudo expandirse a otro tipo de franquicias, como las películas con actores reales dirigidas a todo público y la construcción de parques de diversiones, basados en los personajes de sus películas.
Walt Disney murió de un paro cardiorrespiratorio el 15 de diciembre de 1966. Casi toda su vida había fumado y ese hábito le costó contraer un cáncer de pulmón que inevitablemente deterioró su salud.
A día de hoy su imperio sigue creciendo. Cuenta ya con parques de diversiones en diferentes partes del mundo y The Walt Disney Company es una de las empresas con mayores ingresos en el mundo. También cuenta con hoteles temáticos, canales de televisión por cable y uno vía terrestre, administrado por la cadena ABC.
Citas célebres de Walt Disney
- Podemos aprender mucho de la naturaleza en acción.
- Sólo espero que nunca perder de vista una cosa: que todo empezó por un ratón.
- No duermas para descansar, duerme para soñar. Porque los sueños están para cumplirse.
- La forma de empezar es dejar de hablar y empezar a hacerlo.
- Son muchas las manos y los corazones que contribuyen al éxito de una persona.
- El amor es una filosofía de vida, no una etapa de enamoramiento.
- Disneyland nunca estará terminado. Seguirá creciendo mientras exista la imaginación.
- Por cada risa, debe haber una lágrima.
- Los adultos son sólo niños crecidos.
- El dinero es algo que entiendo vagamente y pienso en él sólo cuando no lo tengo para financiar mis proyectos.
- Piensa, cree, sueña y atrevéte.
- Nunca pude convencer a los financistas que Disneyland era viable, porque los sueños tienen poca garantía.
- Una persona debe fijar sus objetivos cuanto antes y dedicar toda su energía y talento a ellos.
- El valor de la fuerza de voluntad abre caminos.
- Para crear lo fantástico, primero debemos entender lo real.
- Ideas proceden de la curiosidad.
- Nuestro mayor recurso natural es la mente de nuestros niños.
- Trato de construir una personalidad plena para cada uno de nuestros dibujos animados, que tengan una personalidad propia.
- Mickey Mouse apareció salió de mi mente en una libreta de dibujo, en un tren de Manhattan a Hollywood, en un momento en que la empresa de mi hermano Roy y mía estaba en el punto más bajo y el desastre parecía a la vuelta de la esquina.
- Coraje es la principal cualidad del liderazgo, en mi opinión, no importa dónde se ejerza. Por lo general, implica algunos riesgos, especialmente en las nuevas empresas.
- Sin personalidad, el carácter puede ser gracioso y hasta interesante, pero a menos que las personas logren identificarse con el personaje, una historia con un personaje sin personalidad no atrapa a la audiencia.
- Todas las adversidades que he tenido en mi vida, todos los problemas y obstáculos, me han fortalecido…Uno no se da cuenta de cuando sucede, pero una patada en los dientes puede ser la mejor cosa que le puede suceder en un momento dado.
- El placer sano, el deporte y la recreación son tan vitales para esta nación como el trabajo productivo y deberían tener una gran participación en el presupuesto nacional.